Serás inmensamente feliz cuando te aceptes a ti mismo y te ames por ser quien eres! Tú mismo! Dios nos diseñó de forma diferente a los millones de personas que habitan este planeta. No existe un doble tuyo en el mundo. Dicen que nadie tiene la misma mezcla de factores que te hacen único.

Me llevó mucho tiempo comprender este concepto. Muy joven pensé que marcaría la diferencia y sería muy feliz al vivir los sueños altruistas e ideales de otros. Intenté seguir sus modelos y ejemplos y sumarme dedicadamente a sus proyectos. Gasté años enteros de mi vida poniendo mi cuerpo, mente y alma en sacrificio uniéndome a la visión de otros. Yo quería cambiar el mundo siendo una fotocopia y no un original, habiendo renunciado completamente el ser yo mismo.

Después de tantos intentos fallidos terminé aborreciendo a los demás. Y luego acabé decepcionándome conmigo mismo. No conseguía alcanzar las expectativas de los demás. Terminaba frustrado porque descubría que era distinto y que no conseguía ir al ritmo y a la altura de mis colegas. Era torpe, independiente y llamaba la atención y todo me salía mal cuando me embarcaba en el intento de hacer lo que los otros hacían o esperaban de mí. Muchas veces me sentía tan arrasado anímicamente como un patito feo por no poder ser igual a los demás, sentía culpa y condenación y no lograba nunca ser feliz.

Pasaron largos años de victorias y derrotas, progresos y retrocesos. Pero llegó un bello día en que descubrí que mi Creador no me había hecho para ser un patito como los demás, me había creado para ser un águila diferente que volase a grandes alturas donde los otros ni se atrevían a volar. Este fue el día en que descubrí mi Libertad. No dudé en redactar mi propia declaración de independencia y decidí desde ese día ser feliz siendo yo mismo.

Sabes algo mi amigo, muchas personas se sienten inseguras con quienes son, así que constantemente desean ganarse la aprobación de todo el mundo para lograr sentirse mejor consigo mismos. Terminan viviendo su vida para complacer a otros, tratando de cambiar según los conceptos de ellos para ser aceptados. Se comportan de una forma para su jefe, de otra manera para su pareja, y de otra manera para sus amigos. Viven una vida ficticia. Llevando muchas mascaras y esperando poder complacer a todos. En esencia, no son leales a nadie, mucho menos a sí mismos.

Joel Osteen en su libro “Tu mejor vida, ahora!”, dice Si usted desea disfrutar plenamente de su vida, tiene que aprender a ser la persona segura que Dios ha designado que sea. Entienda esto: No fue creado para copiar a otra persona, fue diseñado para ser usted mismo!!! Cuando se vive imitando y deseando ser como otra persona, no solamente se está menospreciando a sí mismo, sino que eso también le roba su diversidad, su creatividad y su singularidad. Dios no quiere un montón de clones, a él le gusta la diversidad y usted no debería permitir que las otras personas le presionen o le hagan sentirse mal consigo mismo. Porque no cabe en la imagen que tienen ellos de quien debería ser usted. Tienes permiso de ser usted mismo!!!

En Vida con Propósitos, Rick Warren enseña que con frecuencia no nos damos cuenta de lo verdaderamente únicos que somos cada uno de nosotros. Las moléculas de ADN pueden unirse en una gama de números infinitos. El número es 10 elevado a la 2.400.000.000. Esta es la probabilidad de encontrar a alguien muy parecido a ti. Para poner esto en perspectiva, algunos científicos han sugerido que todas las partículas del universo son probablemente menos que 10 con 76 ceros detrás, mucho menos que las posibilidades de tu ADN.

Tu singularidad es un hecho de vida científico. Cuando Dios te hizo, rompió el molde. Nunca ha existido ni existirá alguien exactamente igual a ti. Es obvio que a Dios le gusta la variedad, mira alrededor! El nos creó a cada uno con una combinación única de atributos personales. Dios hace a los introvertidos y a los extrovertidos. A los que le gusta la rutina y a los que le gusta la variedad. El hace personas “pensadoras” y “perceptivas”. Algunas trabajan mejor cuando se le asigna un trabajo individual mientras que otras trabajan mejor en equipo. La Biblia dice que “Dios obra a través de personas diferentes, pero es el mismo Dios quien cumple su propósito a través de todos ellos.”

Si usted desea triunfar en algo o simplemente ser feliz, sé lo que tú eres, atrévete a ser diferente y a afirmar tu verdadera personalidad. Y si tu don natural comienza a ser despreciado por los demás, e intenten remodelarte de acuerdo a sus planes personales, no te rindas jamás a su dominio! Reacciona! No dejes a nadie privarte de aquello que tu naciste para ser y hacer! Y recuerda que si tú no te desarrollas para ser tú mismo, en breve otros irán a servirse y hasta llegar a abusar de ti. No tengas miedo de ser tú mismo, mi amigo! No olvides que eres único! Vive la plenitud de tener una buena razón para vivir!!

Autor: Alberto A. Conti – Editor Tesoros del Alma